Cómo leer un plano arquitectónico

Un plano va más allá de una distribución de vivienda con superficies útiles de cada una de sus estancias. Hay mucha más información, pero para las personas que no han estudiado arquitectura o interiorismo, puede resultar difícil saber leer toda la información expuesta en dicho plano. El objetivo de hoy es ayudaros a entenderlos mejor.

 

¿QUÉ ES UN PLANO?

La realidad es percibida por todos nosotros a través de una experiencia tridimensional y los dibujos arquitectónicos nos ayudan a expresar en planos de dos dimensiones la información, de forma que pueda ser leída con mucha más precisión, tanta como sea necesaria para que un profesional de la construcción pueda construir un edificio.

REPRESENTAR MATERIALES

En la documentación gráfica de un proyecto se pueden identificar fácilmente los materiales de los que están hechos los revestimientos de suelos, paredes, peldaño inferior y superior de escaleras, … Toda esta información la solemos representar a través de tramas y leyendas, de forma que industriales, colaboradores y clientes podáis identificarla ágilmente.

Representar una realidad tridimensional en planos de dos dimensiones es más que necesario y para ello se realizan tres grupos de planos fundamentalmente:

· Plantas: Corte horizontal de un edificio a la altura aproximada de 1,5 metros del suelo.

· Secciones: Cortes verticales, de los cuales se pueden hacer tantos como sean necesarios.

· Alzados: Pueden ser exteriores o interiores (incorporados en una sección) y su objetivo es más compositivo y de detalle.

QUÉ NOS ENSEÑA CADA PLANO

· Los planos de planta nos explican los accesos y recorridos a través de la ubicación de puertas interiores y exteriores, en ellos también aparece el mobiliario, tanto el fijo (cocinas y armarios empotrados), como el móvil (camas, sofás y mesas).

Su correcta interpretación nos da la información necesaria para imaginarnos las dimensiones de cada pieza sin necesidad de cotas. Desde una perspectiva técnica, sirven para explicar las distintas normativas, especialmente aquellas relacionadas con la habitabilidad o el despiece y funcionamiento de elementos tan complejos como una cocina o una sala de máquinas.

En estos planos solemos encontrar líneas discontinuas que se utilizan para mostrar el movimiento de apertura de puertas o la ubicación de determinados elementos por encima de 1,5m, como por ejemplo un falso techo.

· Las secciones son cortes verticales de un edificio, en ellas se muestran los elementos seccionados con líneas más gruesas y a veces con un relleno entre ellas para identificar paredes y suelo.

Toda la información que se representa, aparte de lo seccionado, se hace con distintos gruesos de línea y tonos de grises para explicar la profundidad de los objetos representados.

En los planos de sección, la información más relevante es toda aquella relacionada con la altura de las cosas: La altura libre de la planta, la de las ventanas, saber cuántos escalones tiene la escalera, etc.

Además, también se utiliza para señalar los materiales de acabado de paredes, donde va pintura y donde alicatado, o para mostrar alzados interiores de determinadas piezas importantes como las cocinas y baños.

· Los planos de alzado tienen, por norma, una función menos técnica y más visual, su objetivo es el de mostrar en 2D una visión lo más cercana a la realidad. El siguiente paso ya es la infografía tridimensional.

En los planos de alzado la única información técnica suele ser la de materiales de revestimiento y composición de los elementos, ya sea en fachadas exteriores como en alzados de estancias en interiores.

INFORMACIÓN TÉCNICA

Hay planos de venta, planos normativos, planos de replanteo de obra… mucha información puede expresarse en estos documentos. Aquellos orientados al cliente son los de venta, con una estética muy trabajada para que sean fáciles de interpretar.

El aspecto técnico más importante para saber leerlos es la escala a la que están dibujados. La escala es la relación de proporción entre el plano y la realidad, un dibujo a escala 1:100 indica que cada centímetro que midamos en el papel equivale a 100cm en la realidad. Un plano 1:50 significa que cada centímetro son 50.

Otro elemento importante son las leyendas, pequeñas cajas de información alrededor de los dibujos que nos traducen determinadas señales que encontramos en algunos planos, hay leyendas de instalaciones, de materiales y de normativa entre otras.

También conviene saber interpretar las tramas, sirven para informar del despiece del alicatado, el color de una pared o el material de qué está hecho un elemento seccionado.

Si llegan a tus manos planos técnicos de obra podrías encontrar sistemas de representación de cimentaciones, planos topográficos, armados de estructuras o planos de saneamiento, todos ellos mucho más complejos de interpretar que los de venta.

DETECTAR ERRORES CON EL PLANO

Para analizar un plano lo primero de todo será identificar su escala, si no aparece, utiliza la longitud de las camas (entre 1,9 y 2m) o la altura de las puertas (2,10m) para averiguarlo:

1. Marca los recorridos habituales sobre el plano y señala en rojo los que crees que molestarían a otros usos (para ver la TV, por ejemplo), estarás a tiempo de cambiar las puertas de sitio.

2. Confirma que la cama es de la anchura esperada, quizás sea de 1,35m y no de 1,50m; y que a lado y lado haya, mínimo, 60cm de paso.

3. El espacio de separación entre la mesa del comedor y la pared ha de ser mayor de un metro para poder sentarse cómodamente, 1,20m es lo ideal.

4. Mide la distancia entre el sofá y la pared antes de comprar la TV, si ya la tienes, comprueba la distancia necesaria.

5. Juega con los planos, imagínate viviendo y usando la casa, por ejemplo: llegando a casa con la compra, ¿dónde dejas las cosas? ¿cómo cargas la nevera y la despensa? ¿es cómodo? ¿está todo cerca? etc.

6. Dibuja personas en planta y alzado usando la escala, te ayudará a tomar consciencia del tamaño de los espacios.

7. Si aun así no lo ves claro, traslada las medidas de las cosas al suelo con cinta de pintor y experimenta.

8. Dibuja el acceso de luz a las estancias y detecta los elementos que la bloquean, quizás quieras hacer algún cambio de distribución colocándolos de forma que no lo hagan.

No todo el mundo tiene la misma capacidad de visión espacial, pero seguro que estos sencillos consejos te ayudarán a mirar los planos con otros ojos de ahora en adelante. ¡Nos vemos en la próxima entrada!